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Operando con molienda de soja desde 1979, cuando puso en funcionamiento la primera planta cooperativa en Paraná, Cocamar Cooperativa Agroindustrial anuncia el inicio de la construcción en los primeros meses del próximo año de una nueva estructura industrial en Maringá (PR), con capacidad de procesamiento para 5 mil toneladas de granos/día, volumen que podría incrementarse a 7,5 mil toneladas en el futuro.
Se espera que esté lista en 2027 y será una de las máquinas trituradoras más grandes e innovadoras del país, aumentando su capacidad de procesamiento actual en un 70%.
La construcción de esta nueva industria es parte de un amplio redimensionamiento del parque industrial de la cooperativa, que comenzó en los últimos años e incluyó la ampliación de la capacidad de recepción de cosecha y almacenamiento estático de granos a los actuales 2,8 millones de toneladas, entre varias otras mejoras.
Esta industria también permitirá a Cocamar aumentar la neutralización de la refinería de petróleo de las actuales 200 mil toneladas/año a 350 mil y, en el futuro, la capacidad de su industria de biodiesel. La nueva estructura también requerirá la construcción de una nueva terminal vial y ferroviaria para manejar la cantidad de salvado y aceite que se producirá, así como ampliar la capacidad de almacenamiento de salvado y el patio de clasificación para dar cabida a la expansión del flujo de camiones.
El conjunto de logros considera una inversión de más de R$ 1,5 mil millones, parte del cual ya fue gastado en ampliar la capacidad de almacenamiento, utilizando ahora, como una de las fuentes de recursos, una línea de financiamiento obtenida de la Finep - Financiadora de Estudios y Proyectos, institución pública vinculada al Ministerio de Ciencia, Tecnología e Innovación.
“Es el proyecto más grande en toda la historia de Cocamar”, destaca el presidente ejecutivo Divanir Higino, destacando la modernización de estructuras y la ampliación de la industrialización.
Higino explica que aumentar la molienda significa agregar más ingresos a la producción de casi 20 mil productores cooperativos, el 70% de los cuales son pequeños, atendidos por una red de 115 unidades operativas distribuidas en los estados de Paraná, São Paulo, Mato Grosso do Sul, Mato Grosso y Goiás Y, con una industria más grande y más eficiente, Cocamar prevé aumentar sus ingresos y resultados.
Otro aspecto social importante de la obra es que durante su ejecución, que durará aproximadamente dos años, se contratarán más de 1,5 trabajadores y cientos de prestadores de servicios, la mayoría de ellos de la propia región.
“Nuestro objetivo es hacer que la cooperativa sea más competitiva dentro de la cadena de la soja”, agrega Higino, destacando que la organización tiene una tradición de verticalización y la nueva planta permitirá absorber prácticamente toda la soja depositada por los cooperativistas en el estado de Paraná. En la cosecha 2024/25, actualmente en curso, la previsión de Cocamar es recibir 2,75 millones de toneladas del producto y más de 3 millones de toneladas en 2027, cuando podrá procesar al menos el 50% de ese volumen.
Otro detalle es que por su tamaño, la industria ayudará a principios de año a liberar espacio en los depósitos de granos y, de esta manera, acelerar el cobro de cosechas de los cooperativistas.
Con las innovaciones previstas en el proyecto, la industria Cocamar deberá contribuir a establecer nuevos parámetros para el sector de molienda de soja a nivel nacional, lo que también crea referencias para mejorar la competitividad del país.
En términos ambientales, la planta consumirá menos agua, vapor, solvente y biomasa, además de no generar efluentes. Comparando con una hipotética estructura convencional y la misma capacidad de producción, se estima reducir en 230 millones de litros/año de agua y 125 mil toneladas/año de vapor, 700 mil litros/año el consumo de solventes (derivados del petróleo) y 10,4 Miles de toneladas/año de biomasa. En otras palabras, entre varios otros beneficios, habrá un menor consumo de energía por tonelada de soja procesada.
Es una industria 4.0, totalmente automatizada, fácilmente manejable por ordenador y totalmente personalizada. Si hoy Cocamar produce harina de soja con un 46% de contenido proteico, con la nueva estructura será posible ofrecer al mercado nuevos productos, entre ellos la harina de hipro, con un 48% de proteína.
La nueva planta representa un salto adelante en diseño técnico e innovación. Utilizando tecnología de punta, la industria estará equipada con sistemas de automatización avanzados, control digital en tiempo real y procesos optimizados para la eficiencia energética. La implementación de tecnologías como pelado en caliente y extractor maximiza el rendimiento y la calidad de los productos.
Además, la planta será sostenible, con sistemas de recuperación de disolventes y generación de vapor a partir de aguas residuales, en línea con las mejores prácticas medioambientales y reduciendo significativamente el consumo de recursos naturales, como el uso de efluentes.
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